Nuestra aventura en Transilvania con Aventuria Expediciones ha sido una experiencia inolvidable. Antes de partir, nos aseguramos de realizar la preparación y trabajo previo necesario para garantizar el éxito de nuestro viaje. Revisamos minuciosamente nuestros vehículos, realizamos cambios de aceite, ajustes y reparaciones para asegurarnos de que estuvieran en óptimas condiciones.
Sin embargo, no todo fue tan sencillo. Enfrentamos dificultades como problemas con el transporte de los vehículos, el aumento del precio del combustible y el paro del transporte. A pesar de estos contratiempos, nuestro grupo se mantuvo firme en sus planes y mostró un entusiasmo incansable por la aventura que nos esperaba.
Decidimos transportar nuestros coches Toyota en camión y nuestro traslado en avión y se planteó nuevos desafíos en un entorno montañoso. Nos encontramos con pistas difíciles de seguir, los coches atrapados en el barro y bloques de hielo que dañaron algunos de los vehículos. Sin embargo, la belleza del paisaje nos dejó sin aliento y nos impulsó a seguir adelante.
Bajo el nombre de "Transilvania Adventure", nuestros aventurianos se adentraron en Rumanía en busca de acción y aventura. A medida que continuamos nuestro viaje en vehículos todoterreno, nos enfrentamos a diversos desafíos, incluyendo problemas mecánicos como un fallo en la dirección. Sin embargo, también tuvimos la oportunidad de explorar paisajes impresionantes, visitamos un santuario en honor a los soldados fallecidos en una guerra.
Nuestra determinación para superar obstáculos y nuestra disposición a improvisar y explorar nuevas rutas nos llevó a descubrir nuevas aventuras en el camino, aunque no logramos seguir el track original. Encontramos algunos problemas en los vehículos y nos vimos en la necesidad de improvisar soluciones, visitamos el famoso castillo de Drácula y continuamos nuestra aventura en las zonas rurales.
Durante nuestro recorrido, nos encontramos con desafíos como barro y nieve, lo que dificultó nuestro progreso. A pesar de los obstáculos, no dejamos de intentar superarlos utilizando bloqueos y cabrestantes. Sin embargo, en algunas situaciones nos vimos obligados a retroceder debido a las condiciones adversas. También experimentamos problemas con el congelamiento de los mecanismos de los vehículos, lo cual nos obligó a adaptar nuestra ruta.
Aunque no logramos llegar a todos los destinos deseados, nuestra determinación y espíritu de equipo se mantuvieron intactos. Durante el viaje, tuvimos la oportunidad de visitar un museo de automóviles rumanos y disfrutar de los hermosos paisajes naturales de la zona.
Finalmente, llegó el momento de dar por terminada nuestra aventura y dejar los vehículos en un lugar para su regreso a España. Aunque nos entristeció tener que abandonar esta experiencia, nos sentimos satisfechos de haber cumplido nuestro objetivo y ya estamos pensando en futuras aventuras que nos esperan.